En una reciente publicación del buscador de talentos The Muse, se plantean aquellas preguntas inteligentes y apropiadas que un entrevistado debe hacer a su entrevistador, luego de que al final de la entrevista se le invita a hacer preguntas.
Hoy me propongo analizar esas preguntas, desde la perspectiva del entrevistador, esto es, cómo lograr que esas preguntas del entrevistado sean parte importante del insumo que ayuda a quienes deciden si contratar o no al candidato, y no solo resolver algunas dudas de este.
Es un hecho, en la gran mayoría de los casos, el entrevistado se limitará a preguntar los tiempos del proceso de selección, la fecha en que debería iniciar si es contratado, cómo es un día típico en la empresa, detalles sobre un esquema de remuneración variable, u otras cuestiones de poco fondo. Es como si los entrevistados quisieran terminar pronto la entrevista.
Esas preguntas que el entrevistado formula pueden marcar la diferencia entre un “te dejaremos saber pronto…”, o un “cuándo arrancamos”.
Algunos entrevistados saben que esa puede ser su oportunidad final para dejar una impresión sobresaliente. No hay nada más evidente en una entrevista que un entrevistado que quiere lucir inteligente a toda costa. Es algo humano, aunque no siempre se manifiesta, y ya estará en el criterio del entrevistador digerir esta actitud de una u otra manera.
Un segundo hecho: un entrevistador quiere siempre ser sorprendido por las preguntas del entrevistado. Incluso si la pregunta causa cierta incomodidad, muy posiblemente le dará unos puntos adicionales al candidato.
1. ¿Quién hace la publicidad de la empresa? Correcto! Es una pregunta específica para ciertos cargos en marketing o estrategia comercial, pero ayuda a entender que el candidato tiene una curiosidad concreta en este sentido, y quizás ya posee algún criterio sobre la manera en que la empresa comunica sus productos o servicios a su público objetivo. Si quien entrevista es además alguien del equipo comercial, esta pregunta ayudará a conversar y entender ideas e impresiones sobre comunicación masiva y publicidad que el candidato tiene. Es una buena y espontánea manera de profundizar en sus competencias.
2. ¿Cómo impacta esta función el crecimiento de la empresa? Una pregunta que pone a pensar. Así sea una pregunta pre elaborada por el candidato para mostrarse estratégico y muy interesado, la conversación que se desarrolle a partir de esta pregunta puede dar buenas luces sobre su manera de entender la función y su rol en la vida incluso. Ayuda a profundizar en aquello que se espera de esa función en la empresa. Top of Form
3. ¿Podría presentarme a alguien del equipo con el que trabajaré? Es sin duda una gran pregunta. Muestra que para el candidato, el encuadre cultural es importante y le interesan las dinámicas del equipo más allá del rol del cargo. El candidato quiere mostrar que no solo le interesa llegar cada día a hacer su trabajo, con sus audífonos puestos. Nuevamente, es lo que suceda luego de la pregunta lo que a usted le dirá más cosas sobre la persona.
4. ¿Quién hacía esta función antes, y por qué se retiró de la empresa? Si la pregunta es realmente espontanea, es una pregunta muy reveladora para el entrevistado, y ojalá el entrevistador sea sincero en su respuesta. Si el entrevistador se muestra dudoso o no responde claramente, perderá posiblemente la empresa un buen candidato.
5. ¿Qué le gusta más de trabajar aquí? Algunos entrevistadores se sentirán un poco violentados con esta pregunta, mas si lo pensamos bien, es una excelente oportunidad para entender qué mueve al candidato en su trabajo; aquello que realmente lo emociona al hacer una labor y por tanto su productividad será máxima.
Se abre una oportunidad para preguntarle, si no lo ha hecho ya; ¿por qué quiere usted trabajar aquí?
En la tarea de seleccionar personas durante años, he escuchado preguntas increíbles de los candidatos, así como otras que sospecho el candidato luego lamentó. Luego de muchos procesos de selección para organizaciones y funciones de todo tipo, uno de los momentos que más aprecio -y disfruto- de la entrevista, e incluso de todo el proceso, son estas preguntas finales que el candidato hace.
Siempre espero preguntas del candidato, y hago todo lo posible por estimularlas. Debo confesar que decepciona un poco cuando no las hay. Sin curiosidad, los seres humanos podemos ser tediosamente planos.